martes, 8 de junio de 2010

Cajas, cajas, cajas...


Me encanta poner todo en cajas, forrar cajas, guardar cajas y cuando entrego tarjetas, recordatorios, etiquetas, o invitaciones suelo ponerlo en una cajita... a veces me lleva más tiempo encontrar la caja adecuada que el hacer los recordatorios (¡pilín perfeccionista!)... Pero he redescubierto una tienda en la que te hacen las cajas a medida y forradas con unos papeles alemanes preciosos: Tinta Gris, y ya veis que bien han quedado estos recordatorios en estas cajas.
Los recordatorios eran para Blanca, que estaba guapísima. Hice dos modelos: un punto de libro en un azul viejo, y un recordatorio con foto. La fotografía era en color, pero parecía que fuera sólo en blanco y tonos de marrón, por eso busque un cartón que fuera exactamente el tono castaño-rubio de su envidiada melena lisa (¡envidiada por mis hijas, claro, que detectas que están adolescentes en cuánto empiezan a utilizar la plancha!)